domingo, 12 de diciembre de 2010

Saber que nadie anda preguntando por ahí quién es el valiente de decir la verdad. Y pensar que el mundo no aprende a callarse. Hay lugares en los que deseamos encontrar y tal vez, si encontráramos se acabaría el juego, perdería la gracia. Pero sabemos que no encontrar causa frío, rencor.. desconcierta. De esta forma también es muy posible alejarse. Y las personas cambian de posición, y primero es uno quien piensa algo y luego el otro se pone en su lugar. Tal vez no sean compatibles, o probablemente lo son en grandes magnitudes. Cambiar y confundir a los miedos, para llegar a desearlos, será finalmente veneno. Es momento de dejarlo crecer.

No hay comentarios:

Publicar un comentario